Tras un minucioso proceso de restauración, la cabaña de trabajo constituye hoy un símbolo de la presencia de Fidel en esta tierra y un espacio hasta donde llegan ahora las nuevas generaciones de santaclareños para encontrarse con su eterno legado.
El primer teniente Luis Enrique Miranda Nicado, uno de los principales responsables de la restauración, ya había tenido un acercamiento al inmueble. Fue entonces cuando descubrió el invaluable significado histórico del sitio.
Nicado reconoce la decisiva participación del Fondo Cubano de Bienes Culturales en la restauración capital de la cabaña de Fidel en Villa Clara.
En este sitio de profundas raíces patrias, se exhibe una muestra fotográfica y objetos de gran valor que nos devuelven a un Fidel humano, siempre cercano a su pueblo.